Mortalidad infantil en México: logros y desafíos
Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la Universidad Nacional Autónoma de México
Centro de Investigaciones en Políticas, Población y Salud
de la Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México
Introducción
De acuerdo con información reciente (2016), anualmente en el país mueren cerca de 25 mil niños menores de un año, esto es 68 por día o tres cada hora. Si ponderamos este dato por el número de nacidos vivos en el año, tenemos que la tasa de mortalidad infantil (TMI) es de poco más de 12 defunciones por cada mil nacidos vivos.1 Un número importante de los fallecimientos registrados se refiere a muertes que podrían haberse evitado.
México ha tenido a lo largo de décadas avances considerables en el abatimiento de la mortalidad infantil (MI). Esto constituye un éxito para el país que refleja el avance de las condiciones de vida de la población. Sin embargo, junto a la mejoría registrada aún persisten rezagos importantes, de manera que el esfuerzo para evitar las muertes infantiles está lejos de poder considerarse concluido. Por ello, en este artículo nos hemos propuesto analizar, además de la evolución del fenómeno, algunos de los retos que aún se enfrentan en este tema.
En este documento, primero se presenta un análisis de los progresos en el abatimiento de la mortalidad en menores de un año en México durante casi siete décadas, comparándola con datos internacionales a afecto de ponderar la mejoría. Para considerar la evolución de la MI en México desde una perspectiva de género se compara la razón de masculinidad de los nacimientos y de las defunciones de menores de un año.
En seguida se revisan las causas de muerte infantil como parte del análisis. Por último, también se explora la evolución de la mortalidad infantil por entidad federativa, y se contrasta con algunos indicadores de rezago social y de atención a la salud.
El objetivo fundamental de este trabajo es realizar una puesta al día en el tema de la mortalidad infantil, pero sobre todo llamar la atención sobre la importancia de atender ciertos aspectos relacionados con las inequidades históricas que prevalecen al interior del país, y con la necesidad de diseñar y poner en práctica una estrategia renovada para el grupo de menores de 29 días, al tiempo que se atienden los principales factores detrás de la ocurrencia de muertes de menores de un año en México.